La vida de un trabajador de la RTVA vale 8 veces menos que la de un directivo o miembro del Consejo de Administración.
O eso es al menos lo que piensa la dirección de esta empresa, que ha llegado a contratar un seguro de vida en el que, entre otras ventajas, el capital asegurado es hasta 8 veces superior para directivos y miembros del Consejo de Administración que para las trabajadoras y trabajadores que hacemos la radio y la televisión pública de Andalucía.
Los privilegiados de esta empresa siguen manteniendo unos sueldos muy superiores a la Presidenta de la Junta de Andalucía (la excepción a una Ley que a los trabajadores nos lleva recortando tres años), sus aparcamientos en plazas “reservadas para la dirección”, amplios despachos vacíos, horarios y permisos especiales, y un largo etcétera. Mientras trabajadoras y trabajadores seguimos produciendo en situaciones cada vez más precarias.
Hay que pagar a la dirección conforme a su valía o al menos eso es lo que se nos vende desde el gobierno andaluz. Hay que pagar su fatídica gestión para esta empresa pública, en un verano en el que una vez más, se han suprimido los informativos locales, sufrimos cada día un sistema obsoleto con caídas constantes, la parrilla está formada por una programación errática y de refritos, por programas hechos con prisas a costa del sobreesfuerzo del personal de Canal Sur y subcontratas, donde no ha habido contratación para suplir las horas extras generadas durante el primer semestre, con audiencias e ingresos por publicidad a la baja, no cumpliendo ni tan siquiera con el deber de servicio público.
Eso sí, son diligentes para mandar cámaras “de cartón” allí donde haya un consejero, un delegado del gobierno andaluz o concejal. Aunque el acto no tenga ninguna relevancia informativa y haya que dejar de hacer información social o cultural, de interés para la ciudadanía. Suponemos que esos son los méritos que atribuyen nuestros políticos a esta dirección y así premian, por ejemplo, a nuestra exdirectora de Antena (que ha bajado la audiencia a mínimos históricos), con la Dirección General de la Radiotelevisión de Castilla La Mancha.
Mientras, se acerca septiembre y sobre los trabajadores vuelve a pender la amenaza de una reestructuración de Canal Sur TV y Radio sin que conozcamos absolutamente nada de los términos. Y todo justo antes de la negociación de un nuevo Convenio Colectivo. La plantilla no puede permanecer de brazos cruzados, Comisiones Obreras propone al resto de sindicatos realizar asambleas en todos los centros de producción para organizar una respuesta unitaria, clara y contundente a esta dirección provisional centrada en la defensa de sus intereses personales y no en los de esta empresa pública.
Seguiremos informando