La ciudadanía andaluza, en estos momentos difíciles y dolorosos, nos exige información veraz y de Servicio Público. Sin embargo, la dirección de la RTVA, se ha instalado en el panfleto político y el servilismo de algunas productoras que, sin velar en ningún momento por la seguridad de las trabajadoras y trabajadores, están haciendo su agosto a costa de esta crisis.
Comisiones Obreras ya planteó que la programación debía ser la esencial para informar y entretener. Los informativos de un fin de semana y programación enlatada con un sólo objetivo: reducir al máximo la actividad para, precisamente, garantizar el Servicio Público si se alargaba esta situación, evitando exponer al mayor número de trabajadoras y trabajadores posible. Pero la dirección no ha entendido la situación o, lo peor, no quiere entenderlo. La sobreexposición de las compañeras y compañeros de algunas productoras es una auténtica vergüenza para todas/os. Se aprovechan de la precariedad laboral y la falta de derechos para explotarl@s al máximo.
Andalucía Directo, producida por ADM (empresa participada por la RTVA y la administración andaluza) cuyos trabajadores y trabajadoras son mileuristas. En esta empresa la realización de horas extras diarias es lo habitual, pero no sólo han estado emitiendo a diario, sino que además han estado realizando especiales informativos algunos fines de semana. Jornadas interminables de 9 y 11 horas en la calle, sin la protección adecuada, para que su director (y el nuestro) se pongan medallitas a costa de poner en riesgo -muchas veces- la salud de la plantilla con desplazamientos innecesarios para emitir una información no esencial en estos momentos. Esta semana, por primera vez, La Tarde también emitirá el jueves y el viernes santo, saltándose estos días festivos el estado de confinamiento ¿Quién gana con esto? Ni trabajadoras y trabajadores, ni el Servicio Público.
El mismo desprecio hacia la salud y los derechos muestran en el caso de muchas empresas de servicios cuyos empresarios, al calor de la crisis, han aprovechado para despedir a compañeras y compañeros sin que la RTVA haya hecho nada para impedirlo. Así, en las cafeterías de Sevilla los trabajadores han sufrido un ERTE de forma previa a la aprobación de las medidas especiales del gobierno central. El empresario decidió suspender los contratos el día 13 de marzo (un día antes de la declaración del Estado de Alarma) por lo que las/os trabajadoras/es no se beneficiarán de las medidas aprobadas el día 17. Pero la canallesca de algunos empresarios no tiene límite pues los/as trabajadores/as estuvieron trabajando en San Juan y en el Pabellón el día 16 de marzo (hecho que ya se ha denunciado a la autoridad laboral) ¿Qué ha hecho la RTVA? Pues premiar al empresario y ser partícipe de esta situación de irregularidad.
Similar suerte han corrido las compañeras azafatas, hoy por hoy, despedidas. Igualmente vergonzoso es que se esté forzando a los compañeros y compañeras de Seguridad a hacer determinadas funciones en los platós de San Juan (donde el aforo está más que limitado en estas circunstancias) o que la dirección de producción mantuviera a las Intérpretes de Lengua de Signos en la redacción de la segunda planta, cuando ésta fue evacuada para su desinfección, la semana pasada.
Desde CCOO de Canal Sur y RTVA denunciamos que la dirección de la RTVA ha suspendido los contratos a las empresas de servicios incumpliendo el Art. 11 del Decreto Ley 3/2020 de la Junta de Andalucía, que determinaba para esta situación de Estado de Alarma la NO SUSPENSIÓN de los contratos de servicios. Lo que se debía traducir en que nuestras compañeras y compañeros de las contratas de servicios tendrían garantizado su salario, aunque no pudieran realizar sus funciones por las medidas establecidas. Para Comisiones Obreras la realización de determinados ERTE's (caso de peluquería y maquillaje), despidos u otras situaciones distintas a las medidas excepcionales establecidas por el gobierno central o autonómico (caso de las azafatas y trabajadoras/es de las cafeterías) es inasumible para una empresa -la RTVA- que se llena la boca cuando habla de “Responsabilidad Social” pero permite y colabora en estos atropellos.
El ejercicio solidario y responsable que la mayoría estamos realizando topan con la insolidaridad y avaricia de una dirección y algunos empresarios que sólo miran por el beneficio propio ¡Una vergüenza!
